El síndrome de piernas inquietas, RLS según las siglas en inglés, es un problema de origen neurológico que afecta a las extremidades, principalmente a las piernas, y que hace que se sienta hormigueo, pinchazos o tensión.
Esta sensación de inquietud en las piernas provoca la necesidad de levantarse y caminar, una acción que consigue calmar de forma momentánea el malestar.
Generalmente se produce durante la noche, lo que complica mucho lograr un sueño reparador. Además, afecta más a la población de mayores y mujeres.
Causas del RLS
Hasta el momento se han desarrollado numerosos estudios, pero no se sabe realmente cuál es la causa. Lo que sí se ha observado es que hay familias donde se dan más casos, lo que hace sospechar que pueda tener un componente genético y hereditario. Asimismo, se sabe que hay enfermedades que llevan asociado este síndrome como la anemia, la diabetes, enfermedades renales, enfermedades degenerativas… Del mismo modo, estimulantes como la cafeína, el alcohol o el tabaco empeoran la enfermedad.
Cómo aliviar el síndrome de piernas inquietas
Todos los estudios realizados hasta el momento han demostrado que no tiene cura. Pero lo que sí se puede es tratar de aliviar los síntomas lo máximo posible. Para mitigar hormigueo, pinchazos y sensación de malestar existen algunos trucos:
- Evitar cualquier sustancia excitante que lo agrave como el alcohol, el tabaco o la cafeína.
- Mantener una buena rutina de sueño que incluya actividades relajantes como leer o escuchar música tranquila y evitar televisión y otras pantallas, como móvil o tablets, para que el cerebro vaya relajado a la cama.
- Dar masajes en las piernas sumergidas en agua caliente para relajar.
- Poner paños fríos.
- Aplicar geles fríos que activan la circulación y después generan calor para relajar las piernas.
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