El arándano es el fruto de la planta de género Vaccinum. Y los hay rojos y azules. Es uno de los frutos con mayor poder antioxidante debido a la sinergia entre los ácidos orgánicos y las 15 antocianinas que posee, entre las que destacan la mirtilina, la cianidina, la definidina, la maldivina, la peonidina o la petunidina.
Pero no sólo es rico en antioxidantes ya que también ofrece un gran aporte de Vitamina C, potasio y fibra. Y, además, son bajos en calorías.
Propiedades del arándano
- Antiséptico. Es muy efectivo tanto para prevenir como para curar las cistitis ya que aumenta la acidez de la orina e impide la proliferación de bacterias.
- Antiinflamatorio. Los antioxidantes tienen un efecto beneficioso sobre las inflamaciones y las reducen.
- Para la memoria. Las antocianinas revitalizan la memoria y, además, previenen su pérdida.
- Previene las enfermedades degenerativas. El arándano es rico en ácido gálico, que previene la oxidación de las células en el cerebro, lo que ralentiza su deterioro ayudando a prevenir enfermedades degenerativas como el Parkinson o el Alzheimer.
- Mejora la vista. Las antocianinas de los arándanos ayudan a prevenir y proteger al globo ocular del daño oxidativo en la retina.
- Para la piel. Sus antioxidantes combaten los radicales libres que causan un gran daño oxidativo en la piel.
Diferencias entre el arándano rojo y el azul
El arándano rojo, cranberry, y el azul, blueberry, realmente son dos variedades de una misma familia. Nacen siendo una baya blanca y mientras que uno madura con una piel roja, lisa y brillante, el otro lo hace con una piel azul más áspera y recubierta de un polvo blanquecino. Otra diferencia está en el sabor. El rojo es mucho más ácido, mientras que el azul es más dulce.
Eso sí, tienen las mismas propiedades tanto terapéuticas como alimentarias.
