La somnolencia y el cansancio son habituales en el cambio estacional. Con la llegada del otoño aparecen los colores rojizos en los árboles, se les caen las hojas, empieza a refrescar… Y aparece también la astenia otoñal. Es simplemente un trastorno temporal derivado de los cambios estacionales, sobre todo otoño y primavera, que puede provocar cansancio, debilidad, somnolencia, tristeza o irritabilidad. Pero todo tiene remedio…

Somnolencia y cansancio son habituales en el cambio estacional

Con la llegada del otoño aparecen los colores rojizos en los árboles, se les caen las hojas, empieza a refrescar… Y aparece también la astenia otoñal. Es simplemente un trastorno temporal derivado de los cambios estacionales, sobre todo otoño y primavera, que puede provocar cansancio, debilidad, somnolencia, tristeza o irritabilidad. 

¿Por qué estamos más cansados? 

La causa principal de la astenia otoñal es un desajuste hormonal puntual. Durante las horas de luz el cuerpo, con la ayuda del triptófano, produce serotonina. Conocida como la hormona de la felicidad, entre otras cosas, da energía y vigor. Con la llegada de la noche, el cerebro transforma la serotonina en melatonina, que es la hormona encargada de regular el ciclo del sueño y la vigilia. 

En otoño comienza a anochecer más pronto y hay menos horas de luz durante el día. Por ello, el cuerpo segrega melatonina antes y, además, produce menos serotonina. Provocando de este modo, mayor somnolencia y sensación de cansancio.

Hábitos para llevar mejor el cambio

La astenia es un trastorno temporal ya que en unos días el cuerpo se va ajustando a esa nueva situación y vuelve a equilibrarse. Aun así, hay trucos para sobrellevarlo mejor o, incluso, para no sufrirlo. 

Adecuar los horarios del sueño es una de las claves. Es decir, ya que el cuerpo manda la señal de sueño antes, es importante ir adelantando poco a poco la hora de irse a la cama. Además, ayuda mucho dormir las ocho horas manteniendo los mismos horarios. Es más, es muy recomendable evitar ‘recuperar el sueño’ durante el fin de semana porque al dormir en exceso en esos días se vuelve a desequilibrar el ciclo.

Además, ya que el cerebro genera menos serotonina se puede aprovechar para hacer deporte ligero o para pasear al sol, lo que aporta vitamina D y ayuda al cuerpo a generar esa hormona. 

Los suplementos también ayudan

Apoyarse en suplementos es una buena idea para ayudar al cuerpo a pasar ese ‘bache’. Energéticos como el gingsen o la jalea real, y los multivitamínicos son una buena manera de lograr vitalidad durante el día. Por ejemplo, en Saludavida tenemos complementos como Magnefort 30 o Nectavitae que son muy efectivos.

Para conciliar mejor el sueño se puede tomar melatonina o triptófano y así descansar las horas necesarias. Te recomendamos Triptófano con magnesio y B6 o Triptófano forte.

Si ya lo dijo Benjamin Franklin: “Acostarse temprano y levantarse temprano hace a una persona sana, rica y sabia”.